Las autoridades británicas han resuelto ya la mayor parte de las incógnitas que prevalecían sobre el trágico incendio en la Torre Grenfell; y aunque esto ha costado también el puesto a varios funcionarios, al menos ha aportado indicios importantes para hacer múltiples cambios en el diseño de los edificios, y evitar que este tipo de tragedias se vuelvan a repetir.

Cómo inició incendio de Torre Grenfell

Después de múltiples testimonios y análisis periciales, parece que ya se tiene un consenso acerca de como inició el voraz fuego que terminó por consumir casi en su totalidad a la Torre Grenfell.

Todo parece indicar que el fuego fue provocado después que estallara un refrigerador en el cuarto piso. Más concretamente en el apartamento de Behailu Kebede, un taxista originario de Etiopía, quien tras el incidente salió para advertir a sus vecinos.

En el apartamento se encontraba Kebede con un amigo, quienes, de acuerdo al testimonio de testigos, parecían tranquilos al comenzar el incendio; al parecer se trataba sólo de un pequeño incendio en su cocina; no obstante que lo que parecía un fuego fácil de resolver, en pocos minutos se volvió un infierno.

De acuerdo a las investigaciones este fue sólo el origen del incendio, pero el mayor problema fue el nuevo recubrimiento de polietileno que se había instalado con fines estéticos en el exterior del edificio. Este comenzó a incendiarse rápidamente, y fue lo que generó que el fuego se extendiera con gran rapidez a lo largo del edificio.

Y aunque Kebede no ha hablado aún con la prensa, de acuerdo al testimonio de amigos, se encuentra devastado y culpándose por las muertes acontecidas. Hasta la fecha son 79 las víctimas del incendio, contando también a los desaparecidos.

Por su parte la empresa de refrigeradores Hotpoint ha emitido un aviso a todos los usuarios que tengan los modelos FF175BP y FF175BG para que se pongan en contacto de forma urgente con la compañía, con el fin de hacer una revisión total de los aparatos y asegurar que no se repita un incidente de este tipo.

Esta investigación también generará probablemente consecuencias mayores en cuanto a las normas de recubrimiento de edificios. Estimaciones iniciales calculan que unos 600 edificios altos tan sólo en Gran Bretaña, cuentan con este tipo de vestiduras flamables que representan un riesgo potencial para los habitantes.

Milagros en la Torre Grenwell

Conforme avanzan los días también se han multiplicado los testimonios de personas que milagrosamente salvaron la vida aquella noche. Muchos fueron salvados por sus vecinos o por los bomberos, aunque hubo también casos de menores que salvaron la vida, después de haber sido arrojados desde la ventana en intentos desesperados de sus padres por salvarlos.

De acuerdo al diario londinense Metro, fueron al menos 3 los menores de edad que lograron salvarse de las llamas, y sobrevivieron la caída de varios metros de altura. Todos ellos gracias a héroes anónimos como “Pat”, un ciudadano británico que salvó la vida de menores arrojados, al capturarlos en el pecho como si se tratara de “un balón de rugby”, de acuerdo al relato de testigos.

La más grande fue una niña de 4 años, de quien existe una fotografía de aquella noche, y quien logró salvarse tras ser atrapada después de caer desde el 5º piso del edificio.

El caso más extremo fue el de un bebé que habría logrado sobrevivir después de ser soltado desde el décimo piso del edificio.